Fluir.

Dedos entumidos, casi más que las ideas

no me sé más, la mayor parte del tiempo no me encuentro.

Solía fluir con tanta facilidad

por los ríos, a través de las ramas de los árboles

en la vida.

Ahora soy parte de un charco de agua estancada

que con el tiempo se apesta más

me debo de evaporar, pero no puedo

ya no se. 

Subir un escalón más,

aunque no haya nada que esperar en la cima.

Recuerdos.

Hoy recordé como se sentía ser tan espontánea, tan feliz por detalles insignificantes, que ahora me pudieran llegar a parecer incluso estúpidos. 

Todo me parecía ligero, el simple hecho de no verme involucrada realmente en cosas importantes me hacía pasar desapercibida, me mantenía a salvo, pero también me mantenía aislada de sentimientos reales. Inexperta, hasta cierto punto inocente.

Es un poco duro poder ver en retrospectiva cómo se siente crecer y cómo el tiempo se va de tus manos, casi tan rápido como el agua que corre por el río; y no vuelve.

Hay cosas que no cambian, algunas evolucionan y otras se quedan solo en el recuerdo, pues son irrepetibles.